Como se llama la adicción a las compras

Shopping addiction deutsch
Los artículos de Verywell Mind son revisados por médicos certificados y profesionales de la salud mental. Los revisores médicos confirman que el contenido es exhaustivo y preciso, y que refleja las últimas investigaciones basadas en la evidencia. El contenido se revisa antes de su publicación y tras actualizaciones sustanciales. Más información.
La adicción a las compras es una adicción conductual que implica la compra compulsiva como forma de sentirse bien y evitar sentimientos negativos, como la ansiedad y la depresión. Al igual que otras adicciones conductuales, la adicción a las compras puede convertirse en una preocupación que provoque problemas en otras áreas de la vida.
La oniomanía (compra compulsiva, o lo que más comúnmente se conoce como adicción a las compras) es quizá la adicción más aceptada socialmente. Piense en ello: Estamos rodeados de publicidad que nos dice que comprar nos hará felices.
Los políticos nos animan a gastar para impulsar la economía. Y, para algunos de nosotros, existe el encanto de querer lo que todo el mundo parece tener. El consumismo, con o sin intención (o una combinación de ambas), se ha convertido en una medida de la valía social.
Adicción a las compras
Shopaholic es un término informal que suele aplicarse con humor. Se remonta a la década de 1940, cuando surgió como combinación de shop (tienda) y -aholic (adicto a las compras). La palabra shop procede del inglés antiguo sceoppa ("puesto, caseta") y está relacionada con el neerlandés medio schoppe ("puesto"). La forma combinada -aholic se basa en alcoholic y denota "persona que tiene una adicción u obsesión por algún objeto o actividad."
⚠️ Atención: El término alcohólico y sus derivaciones que utilizan la forma -ahólico (por ejemplo, adicto al trabajo) a veces se consideran ofensivos; referirse a las personas con adicciones como adictos o alcohólicos las reduce a una etiqueta -que durante mucho tiempo ha connotado fracaso moral y debilidad de carácter- y a un único rasgo. Puede obtener más información sobre los cambios que hemos introducido recientemente en nuestra definición de alcohólico aquí.
Puede que algunos de ustedes reconozcan la palabra por la popular serie de libros de la década de 2000 escrita por Sophie Kinsella. La serie consta de 10 libros -uno de los cuales ha sido llevado al cine, Confesiones de una Shopaholic- y sigue las aventuras de la devota compradora Becky Bloomwood. Como dice la propia Becky en la primera novela: "Ir de compras es muy parecido a cultivar un campo. No puedes comprar siempre lo mismo, tienes que tener un poco de variedad. Si no, te aburres y dejas de disfrutar".
Razones de la adicción a las compras
Los artículos de Verywell Mind son revisados por médicos certificados y profesionales de la salud mental. Los revisores médicos confirman que el contenido es exhaustivo y preciso, y que refleja las últimas investigaciones basadas en la evidencia. El contenido se revisa antes de su publicación y tras actualizaciones sustanciales. Más información.
John C. Umhau, MD, MPH, CPE es especialista acreditado en medicina de las adicciones y medicina preventiva. Es el director médico de Alcohol Recovery Medicine. Durante más de 20 años, el Dr. Umhau fue investigador clínico senior en el Instituto Nacional sobre Abuso de Alcohol y Alcoholismo de los Institutos Nacionales de Salud (NIH).
La Asociación Americana de Psiquiatría (APA) no reconoce la compra compulsiva como un trastorno mental propio. Por ello, no existen criterios coherentes para su diagnóstico. Además, los investigadores debaten si las compras compulsivas deben clasificarse como trastorno adictivo, trastorno obsesivo-compulsivo, dificultad para regular el estado de ánimo o trastorno de control de impulsos.
Las personas que padecen el trastorno de compra compulsiva (a veces denominado trastorno de compra compulsiva) suelen sentir un impulso irresistible y abrumador de adquirir bienes a pesar de las consecuencias negativas.
Adicción a las compras wiki
El trastorno de compra compulsiva (TCC), u oniomanía (del griego ὤνιος ṓnios "en venta" y μανία manía "locura"[1]), se caracteriza por una obsesión por las compras y un comportamiento de compra que provoca consecuencias adversas. Según Kellett y Bolton,[2] la compra compulsiva "se experimenta como un impulso irresistible-incontrolable, que da lugar a una actividad minorista excesiva, costosa y que consume mucho tiempo [que es] típicamente impulsada por una afectividad negativa" y da lugar a "graves dificultades sociales, personales y/o financieras"[2] La mayoría de las personas con CBD cumplen los criterios de un trastorno de la personalidad. Las compras compulsivas se clasifican en la CIE-10 (F63.8) como un "trastorno del control de los impulsos, no clasificado de otro modo". Varios autores consideran las compras compulsivas más bien como una variedad del trastorno de dependencia[3].
Según el médico alemán Max Nordau, el psiquiatra francés Valentin Magnan acuñó el término "oniomanía" en la traducción alemana de 1892 de sus Conferencias psiquiátricas (Psychiatrische Vorlesungen)[4]. Magnan describe la compra compulsiva como un síntoma de degeneración[5]. En su libro Degeneración (1892), Nordau llama a la oniomanía o "manía de comprar" un "estigma de degeneración"[6]. [6] Emil Kraepelin describió la oniomanía a partir de 1909,[7] y tanto él como Bleuler incluyeron el síndrome en sus influyentes primeros manuales de psiquiatría[8]. Sin embargo, se prestó poco interés a la CBD hasta la década de 1990,[9] e, incluso en el siglo XXI, las compras compulsivas pueden considerarse una enfermedad mental apenas reconocida[10].